La fecha más taurina del año es sin lugar a dudas el 15 de Agosto, por este motivo resulta complicado para los matadores que no llevan cuadrilla fija, el encontrar picadores y banderilleros para ese dia.
El 15 de Agosto de 1.998 se anuncio en la plaza de toros de VALVERDE del CAMINO una novillada picada con ganado de GUADAIRA junto a DIEGO URDIALES y ALEJANDRO URBANO se presentaba JOSE MANUEL MONTOLIU, que acudió sin picadores.
Los picadores de los otros matadores cumplimentaron el tercio de varas en los novillos de MONTOLIU.
Es preceptivo en estos casos, que el matador que no lleva la cuadrilla completa reparta los sueldos de los faltantes entre los subalternos presentes.
Durante el sorteo los picadores de los otros matadores ya reclamaron al mozo de espadas de MONTOLIU los sueldos que faltaban. El mozo de espadas les rogó esperaran al finalizar la novillada y en cuanto cobrara de la empresa les abonaría los dos sueldos que faltaban, los picadores querían cobrar a la hora del sorteo, pero ante el rezonamiento del mozo de espadas decidieron esperan al final del espectáculo.
Como la plaza de VALVERDE DEL CAMINO carece de callejón, los mozos de espadas y ayudas tiene que ubicarse en el tendido en la primera fila para poder atender las necesidades del matador y la cuadrilla.
Cuando termino el tercio de varas del primero de la tarde, el picador que había hecho la puerta, con el castoreño calado hasta las orejas se subió por el tendido buscando al mozo de espadas de MONTOLIU para cobrar los sueldos que faltaban. La que armó ese picador con la pata de hierro y las espuelas en el tendido hasta llegar al mozo de espadas.
El mozo de espadas le volvió a reiterar lo dicho en el sorteo, que cuando cobrase de la empresa les abonaría los honorarios.
Al terminar la lidia del segundo de la tarde, dos de los picadores subieron al tendido en busca de los honorarios que tenia que abonar el mozo de espadas, cuando este se percato de que era de nuevo abordado por los picadores, monto en cólera en el tendido y delante de los espectadores les grito lo impertinentes que eran reclamando unos sueldos que aun no había hecho efectivos la empresa, todos los espectadores se percataron de la grotesca estampa de los picadores en el tendido queriendo cobrar.
Al termino de la novillada, el mozo de espadas cobro de la empresa y pago a los picadores los sueldos que tenia que abonarles no sin antes recriminarles su actitud antes y durante la lidia, solo uno de los picadores se disculpo frente a la cuadrilla de MONTOLIU.
